Te pusiste a tierra, ¿verdad? Bien, adelante, puedes leer.
La cuenta regresiva ya ha comenzado. Luego de la prolongada espera, hace un par de semanas supimos la fecha a marcar, y desde ese momento, las expectativas comenzaron a crecer, y con el lanzamiento del tráiler oficial el pasado jueves (10 de marzo), la emoción estalló.
Estamos a nada del estreno de la última temporada de Better Call Saul, el spin-off de la aclamada Breaking Bad, que a pesar de las dudas que generó en su momento, hoy está consolidada como una digna sucesora de la historia de Walter White y compañía. Hay quienes sugieren que el desenlace determinará si se queda al nivel, o incluso si la superaría, aunque para algunos ya lo ha hecho, y entre quienes ya emitieron ese veredicto está nada más y nada menos (y nada más) que Guillermo del Toro, quien la prefiere por encima de la historia original.
Alguna vez leí o escuché (no recuerdo dónde) que algo curioso pasaba con la serie de Jimmy McGill (o Saul Goodman, o Gene Takovic) con el pasar de las temporadas, y es que con cada una, las audiencias disminuían, lo cual se podría deber a que las primeras entregas son más “lentas” y más dramáticas, logrando que muchos se queden a la mitad del camino.
Algo así me pasó la primera vez que vi la serie, a los pocos días de haber terminado Breaking Bad. Vi los primeros tres episodios, y la trama, aunque interesante, no me atrapaba del todo. La dejé por unas semanas, y luego la retomé donde me había quedado; ya no pude soltarla. Apenas salía la primera pantalla de créditos, ya estaba iniciando el siguiente capítulo.
Para cuando terminé el último episodio de la quinta temporada, ya estaba más que involucrado con la serie, familiarizado con los nuevos personajes, y emocionado con las apariciones de viejos conocidos (sin contar a Saul y Mike, cuyas apariciones ya eran conocidas desde el principio).
Fue mayor la emoción cuando la vi por segunda vez, porque sí, te atrapa a ese nivel. Encuentras más guiños a la historia original, así como detalles que pasaron desapercibidos en la primera vista. No te puedes saltar ningún episodio, y de hecho, no te dan ganas de hacerlo (ejem, la mosca, ejem).
Ahora que ya se acerca el desenlace, estoy viendo la serie por tercera ocasión, y pensé en compartir la emoción contigo que lees esto. Si ya has visto Better Call Saul, puede que me entiendas, y si no lo has hecho, deberías darle una oportunidad. Eso sí, sé paciente; podrás pensar que lo primero no lleva a nada, pero lo es todo. Además, las dosis de humor que tienen algunas escenas son brillantes, por ejemplo, la negociación de Jimmy en el desierto para salvar a dos jóvenes emprendedores, o las discusiones que el abogado tiene con Mike en la caseta.
Me gustaría compartir no sólo mi emoción sino algunas ideas que tengo previo al final. Pero antes, una advertencia: es posible que encuentres spoilers, así que si no has visto la serie, puedes detener tu lectura aquí y tomar un vaso de agua de pepino antes de irte.
Pero antes, recapitulemos un poco. Better Call Saul nos presenta la historia de Jimmy McGill, un abogado que busca hacerse de un lugar en el ríspido mundo de la abogacía, y que se enfrenta a un largo etcétera de dificultades que, de a poco, logrará esquivar valiéndose de su astucia y experiencia callejera. Sin embargo, esto mismo es lo que lo llevará por el camino a convertirse en Saul Goodman, el abogado criminal que conocimos en Breaking Bad.
Ahora sí, te comparto mis pensamientos sobre el final.
Kim Wexler sigue por un camino distinto, alejada de Jimmy… o tal vez no
Algo que preocupa a muchos seguidores de la serie es qué pasará con Kimberly Wexler, el interés romántico de Jimmy. La exitosa y talentosa abogada no aparece ni es nombrada por Saul en Breaking Bad, sin embargo hay guiños que podrían indicar que sigue por ahí, por ejemplo, el nombre de la sociedad a la cual Goodman pide que se expidan los cheques, Ice Station Zebra Associates, denominación inspirada en la película Ice Station Zebra, la favorita de Kim.
Aunque así como puede que esté aún relacionada con Jimmy, también es posible que haya roto cualquier tipo de vínculo con él, ya que a lo largo de la serie hemos visto los dilemas morales a los que Kim se enfrenta debido al ejercicio legal de su pareja.
Nacho sigue vivo, pero desaparece
Otro causante de preocupaciones es Nacho Varga, el socio de Tuco Salamanca (sí, el mismísimo Tuco que destrozó a Jesse Pinkman). Recordemos que ha hecho varios intentos por deshacerse de los Salamanca, y en el último que hizo, las cosas no salieron como lo planeado, y es un hecho que irán por él. Sin embargo, puede que logre salir bien librado, o al menos, no con los pies por delante, aunque esto implique enterrar todo recuerdo de Nacho Varga para hacerse de una nueva identidad, quizás con ayuda de Ed Galbraith, el señor de las aspiradoras, quien no aparecería porque, si lo tenemos presente, el actor que lo interpretó, Robert Forster, murió en 2019.
Lalo Salamanca también se esfuma
El carismático pero sanguinario villano es quien va detrás de Nacho, luego del fallido intento de asesinato orquestado por Gus Fring y con la colaboración de Varga. En el tráiler de la sexta temporada pareciera que actúa como incógnito, a la caza de su (posible) ex-socio, y hay varios posibles desenlaces para esa parte de la historia.
Sin embargo, es posible que Lalo evada la muerte y a la ley, al menos por un tiempo, ya que pareciera que en Breaking Bad sigue vivo, esto si recordamos aquella escena donde Walter y Jesse raptan a Saul, y este les pregunta confundido si son gente de Lalo.
Aunque también, hay que recordar esa escena donde Gustavo Fring está por asesinar a Héctor Salamanca, diciéndole que con su muerte acabará con todos los de su familia.
Jimmy seguirá con vida
Este punto me genera mucho qué pensar. El que Saul muera implicaría repetir la fórmula usada con Walter White en Felina, y eso le quitaría originalidad al final. Tampoco usaría el servicio de las aspiradoras; estuvo a punto de hacerlo en el inicio de la quinta temporada, pero declinó hacerlo para “resolverlo él mismo”.
Que se reúna con Kim y vivan felices para siempre sería no sólo poco realista sino muy dis-nee para una historia como la que hemos visto hasta ahora. También dudo que se entregue a las autoridades; ha buscado a toda costa huír de la ley. En todo caso, de enfrentarse ante la justicia, bien podría defenderse a sí mismo o ser defendido por Kim, pero esta idea no me convence del todo.
Puedo esperar todo y nada del último capítulo, excepto lo anterior dicho.
Apariciones de Walter y/o Jesse
Este es el punto de mayor… digamos, polémica.
Hasta el momento, creo que las apariciones de personajes de Breaking Bad no han sido porque-sí; han tenido peso en la narrativa y permitido que la misma se desarrolle, e incluso han añadido profundidad a la historia de algunos de esos personajes. Por ejemplo, Francesca, la recepcionista de Saul Goodman, a quien vimos en la serie original como una persona harta de la vida, o al menos, de la vida en esa oficina. Todo lo contrario a sus primeras apariciones en Better Call Saul, donde la vemos alegre, servicial, paciente y entusiasta. Ya nos podemos imaginar qué pasó en medio para llevarla de la luz a la oscuridad.
No voy a negar que la aparición de Walter y/o Jesse emocionarían, pero sería mero fan service. Se agradecería, claro que sí, pero a menos que haya una razón muy bien justificada en cuanto a la trama se refiere, no le veo sentido a la aparición de cualquiera de los dos.
Previo a que se revelaran fechas oficiales, se filtraron a través de internet varias fotografías de las locaciones donde se estaba grabando la serie, y entre ellas se distinguía tanto la casa de Jesse como la de Walter, por lo que podríamos entender que sí que van a aparecer. Pero me permito decir que preferiría que no fuera así.
Ya veremos qué pasa.
He dejado algunos puntos fuera, ya que corresponden a personajes cuyos desenlaces ya conocemos, como lo es el caso de Mike. Hemos visto cómo en Better Call Saul se enfrenta a dilemas personales por verse involucrado en “el juego”, pero por cómo lo vemos en Breaking Bad, sabemos que terminó de superar esos dilemas. O Gustavo Fring, que ya desde el spin-off era tan despiadado como lo vimos en la serie original.
Si tienes algo que añadir, discutir o comentar sobre todo lo anterior, siéntete en libertad de hacérmelo saber a través de los medios conocidos.
Mientras tanto, sigo viendo la serie, y sigo esperando el estreno de la última temporada, la cual llegaría a Netflix el 19 de abril, un día después de su estreno oficial por AMC, con la emisión de un episodio semanal y la división de la temporada en dos partes, emitiéndose el último capítulo el 15 y 16 de agosto.
Comentarios
Publicar un comentario